domingo, 11 de septiembre de 2011

Ardiendo con furia,
rezo en un templo sentimental.
Peregrino de tu iglesia, tu devoto seguidor.
Inducido lentamente voy...
Entre famas y esperanzas,
esquvando la incomprensiòn
de la heroica indiferencia.El delito delator
Dejo ciego orgullo en el cajòn.
En procesiòn doliente, con un virtual ensueño
robandote sonrisas, con imperioso actuar.
Para que no estès mal.
Doy fe de mi efervesencia que son ecos de guerra.
Preso de im memoria, prometerè aliviar...
para que no estès mal.
Tengo raiz conflictiva, me es imposible mentir.
De tanta melancolia en un tiro me aburrì
de campanas anunciando el fin.
Ilusiones arrancadas.
Huesos que se quiebran en mi.
Soy testigo de mi dicha y de que no puedas ver
en mi ser, mi oculto padecer,
provocarè la histeria
en un maratòn de sueños roto que se iràn
con palidez mortal...
Es el amargo desprecio de la codicia humana
que tenderà tu cama para que no duermas bien.
Y luego te usarà, te usarà!
siguelo! siguelo hasta caer
a tu sueño y a tus ilusinones
solo siguelas!
Voy renunciando al carnaval
por no lograr mis piernas mover.
Durante la corta vida que me queda en los pies
le darè batalla al mar traer!
marmol mudo tan eterno
fraseando lo mejor de mi.
Perdoname si esta noche me volvì sentimental!
La agonìa pronto marcharà.